Este artículo analiza la evolución de las relaciones hispano-mauritanas desde la independencia de Mauritania en 1960 hasta el año 2008. El interés de España por este país ha estado motivado por su cercanía geográfica con las islas Canarias y por ser frontera con el Sáhara Occidental, territorio colonizado por España hasta 1976. Tras una etapa inicial en la que las relaciones estuvieron mediatizadas por los avatares del proceso de descolonización del Sáhara Occidental, la agenda bilateral comenzó a diversificarse tras la adhesión de España a la Comunidad Europea en 1986. No han sido, sin embargo, los aspectos económicos vinculados a la pesca, ni tampoco los comerciales, los que han impulsado el interés español por reforzar las relaciones bilaterales con Nouakchott. Ha sido, sobre todo, la lucha contra la inmigración ilegal, que desde las costas mauritanas intenta acceder a territorio europeo a través de las islas Canarias, lo que ha contribuido a reforzar el carácter prioritario de las relaciones diplomáticas con Mauritania.